BRASIL: El mundial no convence
Las manifestaciones populares crecen día a día en Brasil, el
gobierno de Dilma Rousseff teme que
estas terminen con empañar el próximo mundial.
Parte de las protestas giran en torno al descomunal gasto
realizado para el evento futbolero, el gobierno declara un gasto de 11.000
millones de dólares, solo la remodelación del Maracaná ha costado- hasta ahora-
584 millones de dólares.
Las organizaciones que lideran estas movilizaciones, como el
Movimiento de los Sin Techo, denuncian que este enorme gasto se hace en un país
con enormes deficiencias en materia de vivienda, salud, educación, etc.
Una estrella del Futbol brasilero, Romario, ha sido una de
las voces en contra de la Copa 2014.
Las movilizaciones no han empezado ahora, ya hace tiempo que el pueblo brasilero
parece haber despertado del letargo, la copa de las confederaciones, algo así
como un ensayo previo al Mundial, fue escenario de constantes manifestaciones,
protagonizadas por la juventud; El detonante de aquellas protestas, había sido
el aumento del precio del boleto ,pero esta ahora claro que escondían una
bronca ,un hartazgo más profundo.
La organización de la copa, trajo además otras consecuencias:
el desalojo de cerca de 250 mil personas de sus casas y una gran militarización. Pero las protestas
anti –copa, coinciden con la lucha de distintos sectores obreros, como los
choferes de colectivos, los maestros y hasta los propios policías .La bronca de
la población se ha acrecentado por el aumento de la represión ,los continuos
casos de torturas por parte de la Policía Militar ,y la toma de las favelas.
Además, la crisis que comienza a golpear la región se hace sentir,
sucediéndose despidos y suspensiones en la industria automotriz y otras. El
país del norte ha tenido un crecimiento en los últimos años ,para un importante
sector de la población está quedando claro ,que la mayoría no termina de ver
ese crecimiento ,y que en el Mundial ,se han beneficiado las grandes
constructoras ,los especuladores inmobiliarias ,las cadenas hoteleras , pero
poco queda para la mayoría del pueblo.
La popularidad de Dilma, ha caído en picada, el PT que
parecía haber superado los sucesivos escándalos de corrupción, difilmente pueda
salir airoso de este transe, esta claro que un sector del pueblo brasilero
parece estar dando un salto en su conciencia, al superar la “manija”
nacionalista-futbolera y elevar la mira.
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