SAN PABLO. CORRESPONSAL - 21/03/14
Brasil entró por el corredor peligroso de la inflación. Medida en la segunda semana de marzo, el alza anualizada de los precios (comparado con el mismo período de 2013) alcanzó a 6,5%, que es exactamente el techo definido por el equipo económico brasileño para 2014. La causa según afirman es climática: la sequía vivida por el país desde fin del año pasado redujo la cosecha y provocó un aumento de los alimentos de 1,41% en las últimas 4 semanas. En un año electoral, cualquier descontrol en los precios se presenta como uno de los poquísimos obstáculos capaces de minar en forma efectiva el escenario en el que la presidenta Dilma Rousseff es el candidato con más chances de ganar.
Ayer se difundió la primera encuesta electoral de la prestigiosa consultora Ibope. Según esa pesquisa, que abarcó un universo de 2.000 brasileños en todos los estados del país, si los comicios fueran hoy Dilma gana en la primera vuelta. Tiene 43% de las intenciones de voto, con lo que supera la suma de sus opositores Aecio Neves (15%) y Eduardo Campos (7%). Ibope preguntó a los entrevistados si querían un cambio de rumbo en la economía y la mayoría (63%) respondió que sí. El segundo interrogante fue acerca de cuál candidato tendría más condiciones de promover las transformaciones y se demostró que la mayoría confía más en Dilma (41% de apoyo en este caso) que Neves (14%) y Campos (6%). Ese escenario, sin embargo, puede cambiar y no a favor de la presidenta brasileña. Que se mantenga en el nivel actual va depender, entre otros factores, de que no haya un desmadre de los precios. Lo que provoca hoy la “hinchazón” del índice de precios al consumidor es la sequía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario