Fogata de campamentos

Fogata de campamentos
 ¿Quién se imagina un camping con una fogata eterna, dónde el fuego arde infinitamente sin necesidad que alguien lo toque, que esté siempre prendido para que se pueda calentar cualquier campista, en cualquier época? Creo que nadie podría imaginarse algo semejante, ningún acampante que se precie de tal, puede disfrutar de una fogata armada por otros ajenos a su grupo de campistas, porque las fogatas son elementos propios de cada campamento.
 No hay nada más lindo que conseguir la leña y los elementos para encenderla entre varios, las llamas, el olor y el calor es siempre distinto, llena de alegría y une mucho más a los que la rodean, se siente como propia. Cuando llega el final del campamento, cuando se termina ese período particular, la fogata se apaga, se extingue hasta el último rescoldo, para que ninguna chispa pueda provocar un incendio cuando nadie esté para vigilarla. Se prenderá una nueva en la siguiente oportunidad, y vendrán otros acampantes que armarán su propia fogata. Sin embargo existe una fogata que es difícil de apagar, es como el temido "Fuego Griego" del imperio Bizantino, como la intrigante "Zarza Ardiente" de la Biblia, cómo el voraz "Fuego Valyrio" de George R. R. Martin.
Está fogata tiene vida propia y conciencia propia, construyó un campamento a su alrededor de muy fieles acampantes y tiene la singular capacidad de seleccionar quienes se le acercan y quiénes no, quemando e incendiado todo aquello que no le gusta o no le es afín, y los fieles campistas la defienden como fieros soldados. La Zarza Ardiente de la Biblia, habló y dijo ser la voz de Dios, el Fuego Griego lo utilizó un Imperio para predominar sobre sus enemigos y el Fuego Valyrio en la novela de Martin, lo emplearon los tiranos que se adueñaron del control y el poder de una nación, contra su propio pueblo. Está fogata comparte muchas de estas características. En las organizaciones sociales, sobretodo en los sindicatos, no es bueno que una persona permanezca indefinidamente en el cargo de conducción, porque se siente imprescindible, sin su presencia no se puede hacer absolutamente nada. Aquí es cuando se confunde con las ansias de poder y se arroga ser la fuente de la sabiduría. Y sin dudas no es ni una cosa ni es la otra, pero nadie se atreve a decirlo, porque quién lo haga se quema inmediatamente o los soldados que rodean y defienden al líder, van a atacar y a destruir a quién se oponga.
 Cuando alguien me pregunta ¿Qué es la Federacion Uruguaya de la Salud? Yo respondo orgullosamente que es la organización que nació por y para los sindicatos de la salud privada, la que los nuclea, la que vela por los intereses de cada trabajador de la Salud y también es la representante de este enorme colectivo en los Consejos de Salario. Cuando me preguntan ¿Por qué soy tan crítico con la FUS si es una organización pro trabajadores? Entonces respondo, yo no soy crítico con la Federación Uruguaya de la Salud porque es una institución noble, fundamental y muy necesaria, pero si soy muy crítico con las personas que la dirigen, que se sienten únicos dueños de ésta y portadores de la verdad, ademas tienen el poder para hacer y deshacer a su antojo.
El secretario general con discursos grandilocuentes, facilistas y trillados convence a todos de que es el único capaz de conducir esa organización y así se perpetúa en el cargo. Así como la Zarza Ardiente, se cree la voz de Dios.
Soy muy crítico con los dirigentes que la conducen, porque entiendo que están ciegos y sordos a los intereses y necesidades generales de quienes representan, porque creo que están contaminados por una ideología politica que nubla su juicio y no les permite ser libres de pensar y actuar, mientras que el lider principal se instaló allí como el Fuego Griego de los Bizantinos, sirviendo de arma para los intereses de la ideología. Soy muy crítico con los dirigentes que formaron un bloque sólido, que repele a todo aquel que piense diferente y utiliza su Fuego Valyrio contra sus propios representados, tal y como en la novela de George R. R. Martin. Así le pasó a AFCASMU, a APMU, a un dirigente de AFSA, a cuatro dirigentes de AFAE y cuántos otros más que aún no nos hemos enterado. Víctor