Nuestro camino solo nos conduce a ese lugar…

 

Nuestro camino solo nos conduce a ese lugar…

Estamos hoy, enfrentados a una realidad que cada vez nos debilita más y más. Se ha logrado convencer a los trabajadores que el único camino de lucha que existe es el de ceder el poder a unos pocos quienes conducen y deciden nuestro futuro.

Pertenezco a una Federación que según el último congreso del PIT-CNT, es su filial más grande, la Federación Uruguaya de la Salud. Sin embargo, en cada instancia que presencio, tanto como integrante del consejo central, como en cada Dirección Nacional, nos veo cada vez más sumergidos. Hemos llegado al grado de frialdad sobre nuestra propia realidad, sobre nuestra existencia, donde por amplias mayorías prima el concepto de privatización de la Federación que entre todos construimos. Enfrentados a nuevas reglas impuestas por un gobierno que nos reprime y limita cada vez más. A la deriva, por haber creado derechos sin las garantías necesarias como para que no pudiera venir cualquier gobierno a doblegarlas.

Digo privatización porque frente a embestidas del gobierno de turno, como  la ley de personería jurídica, para muchos resulta irracional  o “demagógico” que algunos propongamos que como Federación, enfrentemos esta imposición como colectivo. Olvidando los esenciales conceptos de solidaridad, unión, federación sindicalismo, etc. Me es casi imposible pensar en el hecho de que hay sindicatos que tienen 50, 100, afiliados que no pueden enfrentar los requisitos que impone la ley por un tema estrictamente económico y por sobre todo, que las direcciones sindicales consideren inapropiado disponer de nuestro fondo colectivo, el cual administra la Federación Uruguaya de la Salud, pero que no deja de ser el aporte de los 33000 y pico de afiliados que dijimos tener en el 19 congreso. ¿Dónde queda entonces nuestro concepto de unión? De solidaridad? De lucha y unidad?

¿Estaré tan fuera de la realidad como lo dice la mayoría del consejo central en cada propuesta, idea o planteo?

¿O será que estamos tan individualizados y amaestrados como este mundo capitalista nos impulsa a estar?

Soltarle la mano a nuestros propios compañeros, no sentir la responsabilidad de brindarles tranquilidad, simplemente definiendo que como colectivo se dará apoyo necesario a cada sindicato que lo necesite, es a mi entender volver nuestro movimiento sindical una empresa más del montón. Dónde solo accede a los beneficios, quien más alcahuete del patrón es. Y jamás en esta vida me dejaré arrastrar por esas posturas.

Enfrentamos grandes cambios y grandes golpes en nuestra realidad como movimiento sindical. Pero también, eso viene de la mano de lo que muchas veces escuché expresar, aunque solo a algunos compañeros de nuestra Federación: faltaron acuerdos con garantías a largo plazo. Se acordó, adoctrinó y definió un camino basados en un enemigo de clase con alguna conciencia popular. Pero no se garantizaron las conquistas de la clase obrera, la perspectiva fue que el gobierno siguiera estando con esa misma orientación.

Perdimos los conceptos y valores fundamentales de nuestros antepasados, quienes crearon la infraestructura que hoy nos brinda nuestro PIT-CNT y nuestra Federación. Conquistas históricas que ningún gobierno pudo doblegar…

Hemos optado por el camino de entregar potestades a unos pocos, para decidir por todos. Ya no se dan esos debates de horas y horas, de tardes, noches, a veces  hasta la madrugada que tanto me contaban mis familiares, sindicalistas todos. Ahora preferimos ir a una Dirección Nacional y darle la potestad a  ”4 o 5 compañeros” que toman la decisiones de definir cuál será nuestro camino. Como por ejemplo, con algo tan importante como LA LEY SOBRE LA SEGURIDAD SOCIAL. Así somos, así estamos.

Mientras sigamos eligiendo el mismo camino, seguiremos siempre llegando al mismo lugar …

Cecilia Borges

Consejo Central de FUS

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