El juicio

 

El juicio: la política por otros medios

APMU: dinero, valores y política

El dineroocupa un lugar central en la sociedad capitalista. Ante su altar sucumben valores y principios y se encienden las peores pasiones. En APMU,tenemos una disputa donde se excita la sed de algunos por el dinero, para lograr el objetivo de cambiar la dirección política del sindicato. En fin, es una forma más de judicializar la lucha política.

Pero…principio tienen las cosas y hay que remontarse muy atrás en el tiempo para intentar comprender algunos desatinos.  La Asociación del Personal de Médica Uruguaya, APMU, es el sindicato de los trabajadores de Médica Uruguaya, tiene cerca de 4000 afiliados y este año cumple 70 años. Sí, ¡70 años!En el artículo 4 inciso b de su Estatuto establece que se creará una CAJA de PREVISIÓN y ese anhelo se concretó en 1956.Es el brazo social del sindicato desde hace décadas. Funcionaba, de hecho, como una comisión con relativa independencia.

Cuando esta dirección sindical (“la 17”) asume hace 4 años, al sindicato casi ningún trabajador concurría, se llenaba cuando se entregaban las canastas y los regalos. Esa era la concepción sindical en APMU, un sindicato de beneficios sociales solventados económicamente por los aportes de APMU y su brazo social, la Caja de Previsión. Al pertenecer a APMU, toda la operativa de CAJA DE PREVISIÓN, desde los funcionarios, el mail institucional, hasta los vales con los préstamos, se hacía a nombre del sindicato, ya que es uno de los pocos que tiene personería jurídica.

Cuando asumimos, pedimos, responsablemente, los balances de Caja de Previsión yfueron negados. Pedimos que llamaran a elecciones (hacía 12 años que no se realizaban), e hicieron oídos sordos a la solicitud. Pedimos una auditoría, la que reveló irregularidades importantes (4 millones de pesos sin comprobantes, por ejemplo). Intentaron formar una cooperativa y desviar el dinero hacia allí. Llegados a este punto, y con compañeros organizados solicitando la intervención de CAJA, decidimos intervenir en legítima defensa de los intereses y valores de APMU. Se desató un pandemonio, con una confusión de intereses encontrados, en el medio de una pandemia sanitaria, una crisis en ciernes y a las puertas de una elección sindical.

Algunos compañeros sostienen que nunca firmaron una demanda contra su sindicato, sin embargo, la firma está y la demanda es clara, y otros aducen, causando perplejidad, que fueron “obligados” a demandar por la actitud intransigente de la dirección de APMU, la que se negó de plano a negociar sobre la base del remate de la casa sindical. Lo que causa verdadero horror es que algunos integrantes de la dirección de APMU (entre ellos una integrante del Consejo Central de FUS) se encuentren haciendo juicio a su sindicato, y no porquereclamen transparencia financiera, ni más democracia, no señoras y señores, reclaman dinero y parte de la casa sindical de los trabajadores que dicen representar.

Pecaríamos de ingenuos si creyéramos que esta movida obedece única y exclusivamente a un interés económico. Detrás de esta avanzada mercantilista de los adalides de la conciencia de clase, está el mal disimulado deseo de cambiar la dirección de un sindicato que, hablando lisa y puerilmente, jode desde hace 4 años.

APMU ha cambiado y ha cambiado mucho. Pasamos de un sindicato vacío a un sindicato efervescente en comisiones y propuestas. Pasamos de un sindicato de acomodos a uno que impuso la transparencia y los llamados para acceder a cargos en MUCAM. Pasamos de ser servidores obsecuentes de la FUS a ser una piedra en el zapato de la burocracia sindical. Avanzamos en derechos, en igualdad, y, sobre todo, avanzamos en dignidad en APMU.

En defensa de la transparencia, de la democracia y de la dignidad estuvimos casi dos años exigiendo explicaciones a la FUS sobre sus padrones y sus finanzas, sin resultados. Muchos de los que hoy promueven el juicio contra APMU, son los mismos que avalaron la suspensión de nuestro sindicato de los órganos de decisión de FUS. Son los mismosque no dijeron ni “mu” cuando, hace unos años atrás, se invitó a las patronales para lanzar el plan de acción de la FUS en el Paraninfo de la Universidad en un hecho que revelaba una clara orientación política de conciliación de clase. Esas mismas patronales al poco tiempo de iniciada la pandemia, enviaron 900 compañeros al seguro de paro.

El objetivo de esta avanzada contra APMU es innegablemente político, es intentar eliminar otra forma de hacer sindicalismo, es matar cualquier esperanza de transitar otro camino diferente al de la burocracia sindical. Y para eso todo vale.

En APMU, junto con otros compañeros de la salud privada estamos transitando por un camino de conquista, no sólo de nuestros derechos, sino de recuperación de nuestra dignidad como trabajadores. Un camino de independencia, de lucha y de solidaridad. Un camino donde los valores son centrales. Este camino no es circunstancial ni es una casualidad. No tiene marcha atrás.

Es un camino lleno de piedras y de sacrificios, pero también de solidaridad, de cariño, de coraje y de valores. Vivimos día a día nuestro sueño de un mundo mejor,aportando un pequeño, muy pequeño, granito de arena.No estamos solos en este sueño, cada día somos más los que trabajamos incansablemente con la firme convicción que aquello que se ve como imposible“solo tarda un poco más”.

 

Rosalba Hunter