Situación Industria frigorífica
BPU - Un bloque ausente
En una nota anterior analicé con salvedad la situación que aún persiste con
los trabajadores del frigorífico BPU de Durazno -parados hasta acordar una
rebaja "digna" de su salario- cuestionando el flojo proceder de los
sindicatos "hermanos" que pertenecen a la misma empresa.
Hoy en día el vox populi en las plantas pone más énfasis en los acuerdos
que se entienden son más lógicos de rebajar, que en la defensa del salario per
se. Como si primero permeara en los trabajadores el pensamiento de la empresa,
antes que el de la protección mutua. Y esto, a mi entender, se da por dos
aspectos: la primera es la banalidad con la que se aborda el tema por parte de
los dirigentes y la segunda fue la excusa perfecta que tiene el trabajador para
justificar su ventajosa estabilidad momentánea. Se que es lamentable que lo
diga, pero miramos para el costado desde un principio, con un diálogo que se
mantuvo en un marco conveniente para la empresa. En las bases nos hemos favorecido
de la situación adversa de los compañeros de BPU, mejorando acuerdos sin llegar
a grandes fricciones con la empresa. El trato es armonioso aunque se muestre
para afuera con apariencia capciosa. Todo se ha mantenido inerme, sin
sobresaltos. Incluso la empresa después de cada paro sorpresivo -producto del
enfrentamiento en los consejos de salarios- nos espera con los brazos abiertos,
asegurando el jornal, como si nada lo desenfocara de su cometido. Se entiende
que el conflicto en los consejos de salarios se lleve toda la atención, pero el
problema en BPU se arrastra en la interna de los sindicatos de Minerva
(Carrasco, Canelones, Pul y BPU) mucho antes que las medidas, desde ese
entonces se ha transitado por un camino de diálogo entre los gremios, que sólo
refleja lo lejos que se está de ponerle condiciones a la empresa. Y esa
dificultad ha determinado medidas insignificantes, personalistas e infladas por
la ficción que prima en el mundo virtual. No podemos simplemente conformarnos
con pequeñas rabietas, acá se está convalidando un método de rebaja salarial,
bancada con plata del Estado, para favorecer a un privado. Más allá de la
situación del gremio en sí de BPU, que entiendo es una de las explicaciones por
la cual no hay una intervención directa del bloque, es importante que los
sindicatos de Minerva den señales de madurez colectiva. Pero sólo el accionar
conjunto de las bases puede fortalecer el bloque y demostrar que hubo un
aprendizaje, ya que a priori, muchos hemos pasado por esta situación en soledad.
Anael Cardozo de Assis
Trabajador del frigorífico Carrasco
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