Redistribución de la riqueza… ó redistribución de la pobreza ?
QUE ES CALIDAD DE VIDA ¿?
Es razonable movilizarse planteando la defensa de una vida de calidad, cuando una pandemia atemoriza y restringe la vida social y el disfrute de la vida? Es razonable no ceder en el propósito de mejorar y defender la vida, cuando sentimos que nos avanza el someternos a chantajes políticos empresariales, a negocios invasivos que agreden la calidad de vida?
En esa disyuntiva se desarrollan y debaten distintas movidas territoriales en Ciudad de la Costa, tratadas despectivamente por algunos medios de prensa como “ambientalistas”.
En un intento de enlistar demandas según la importancia vital, hoy en plena pandemia social, con frío hambre, enfermedades y miedos pandémicos, cabe la pregunta. Hay una inmensa porción de la población, que está fuera de alcance del nivel de atención de privilegio, que tienen los sectores medios y medios altos de la población. Entonces puede parecer chocante el reclamar la defensa de hábitats sanos saludables, rodeados de naturaleza verde, con espejos de agua cercana, con aire limpio. Puede sufrir la acusación de ser una frivolidad; una aspiración de gente que no pasa otras urgencias más básicas. Sería algo así como que si la vida sana, bien alimentada y con ambientes sanos, no tuviera nada que ver con la ausencia de enfermedades.
PERO... Estamos seguros de que NO debe ser considerado básico éste reclamo? Que debemos renunciar a reclamarlo? Hay que igualar hacia abajo? ¿Tánto es el retroceso de tener que aceptar lo que nos den, con el discurso de “la creación de puestos de trabajo” zafrales? que sin duda son necesarios pero que en la propuesta solo crean pan hoy, y vuelta al hambre casi de inmediato? Debemos hacer como si no supiéramos que asociados a esos anuncios oficiales, se promueven proyectos empresariales que se atreven a adelantar y publican sus diseños inmobiliarios invasivos de la vida vecinal existente. ¿Deberíamos negar que sabemos que existe un plan de gentrificación especulativa, con inversiones fantásticas de dinero destinadas a tentar un consumo suntuario, elitista, ajeno a nuestras vidas, y de los cuales no sabemos de qué circuito secretísimo han aparecido esas inversiones, que luego dejan edificios lujosos vacíos, sin vida social real, con la manifiesta propuesta de ser islas de barrios tipo gheto para ricos, que aumentan el vacío social, la contaminación material y la desigualdad? Proyectos y anuncios que en resumen atentan contra la calidad vida, hasta hoy elegida y conseguida por vecinos mudados a convivir en éstas comunidades sin urbes.
Que es lo que se pretende redistribuir… La riqueza, o la pobreza?
En éste Uruguay de hoy se llegan a difundir sin pudor alguno éstos dolorosos datos, que se vienen acumulando desde mucho antes de “los mejores 15 años” : Registrados, en cifras oficiales, hay 589 asentamientos irregulares, donde residen 165.271 personas. El 78% de estas personas se localizan en asentamientos de Montevideo y Canelones. Las ollas populares y merenderos pueblan barriadas y alimentan en zonas donde la tragedia social de no tener comida, desbordó la capacidad de cada grupo familiar o individuo, y se llevan a cabo con mano de obra solidaria generosa y valiente, que enfrentó a la pandemia y al miedo desde el primer día.
Porque dentro y fuera de asentamientos hay 250.000 desocupados registrados oficialmente. Sumarle que dentro y fuera de los asentamientos, hay decenas de miles de trabajadores sin registro ni protección social ni empleo o con subempleo.
Sumarle que sí también, hay registro de 100.000 propiedades -edificios y casas- ociosas, que chocan y duelen contrastando con la cifra de 4.000 personas en la eufemística "situación de calle...". Cifra oficial ésta última que no es creíble, por existir una fluctuación no atendida, no controlable, y en permanente crecimiento.
Suena fuerte, dolorosamente fuerte, escribir que la aporofobia, la corrupción moral y política de instituciones del estado, gobierno tras gobierno, no atienden la demanda social de trabajo digno y vivienda, aun con declaraciones e intenciones públicas que no coinciden, que denuncian esos lineamientos, pero éstos se han impuesto… Solo creció la policialización de la tragedia social. No se invierte lo suficiente, ni se convoca a invertir, en vivienda social ni en infraestructura social. Desde el propio cooperativismo de FUCVAM se reclama año tras año mayor inversión. Que en el mejor de los casos sorteaba préstamos para cooperativas de vivienda, que solucionaban a una minoría de ellas, pero que nunca detuvieron la creciente marginación, ni demanda de vivienda social de sectores que no llenaban los requisitos económicos de ingresos, porque la marginación siempre fue más rápido que el parche. Situación que prosigue y aumenta con éste gobierno de las élites empresariales.
Cual es el aporte para mano de obra, para un plan de viviendas sociales, en éstos emprendimientos de Ciudad de la Costa?
Vamos viendo que los privilegios, llámese favores políticos, a regímenes de excepción para proyectos empresariales vienen gentrificando barrios desde Mdeo, desde el norte del barrio Carrasco. Pasan cerca de las ruinas empresariales en Parque Roosevelt, en su costa sobre Racine y rambla otro proyecto de hotel 5 estrellas¡ pretende desplazar al barrio de pescadores que hace décadas esta allí; se continúan en Av de las Américas, pasan por el hotel Hilton vacío, construido sobre un lago que hace décadas también forma parte del ecosistema amigable; se suma a otra torre sobre el relleno del lago Pesquero, y sobre megaemprendimientos de grandes superficies comerciales, destinadas a consumo alejado del poder adquisitivo de vecinos de las barriadas desplazadas. Así se sigue empujando y se margina hacia la violencia social de barrios marginados.
AsÍ es que llegamos a renovados proyectos sobre zonas de pulmones verdes en los alrededores de las orillas y desembocadura de dunas del arroyo Pando. Parece que habría inversores… o se tienta a que vengan?
“El Uruguay Natural”, es naturalmente especulativo y gentrificable para capitales y políticos desprovistos de sensibilidad social y empatía con las formas de vida elegida por vecinos.
No es ningún disparate afirmar que el sistema político, militar, empresarial, ha generado y sigue generando una inmensa desigualdad social que aumenta día a día.
Difundimos y alentamos la confluencia de la llamada ASAMBLEA MULTIBARRIAL por representar una oportunidad de unir reclamos y acciones comunes, transversales a los sistemas políticos y empresariales. Por dar una oportunidad de expresión a la defensa de ambientes sanos, por y para el pueblo. Bienvenidos sindicatos e instituciones sociales del pueblo, que puedan coincidir con el propósito de defender la vida elegida. Bienvenidos al ambientalismo.
Absurdo es : DESTRUIR HÁBITATS SANOS, DE CONVIVENCIA SOCIAL SALUDABLE, PARA GENERAR MANO DE OBRA. UN ARGUMENTO BURDO, TORPE, Y FALSO, PARA JUSTIFICAR NEGOCIOS QUE EXCLUYEN Y MARGINAN...
Marcos
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