Profesores de Secundaria resolvieron paro nacional para el 2 de setiembre

Denuncian, entre otras cosas, que reciben presiones para subir notas para mejorar índices

La Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes) resolvió realizar un paro general de 24 horas, a nivel nacional, el próximo martes 2 de setiembre.

Según un comunicado emitido tras la asamblea realizada este sábado, los docentes reclaman poner fin al “autoritarismo punitivo promovido por el Consejo de Educación Secundaria”, respeto a la libertad sindical, soluciones que mejoren las condiciones de trabajo y de aprendizaje de los estudiantes, derecho a percibir adecuadamente los salarios y un “accionar ecuánime y ajustado a las garantías del debido proceso por parte de la División Jurídica del Secundaria”.

“Compartimos que hay que modificar las condiciones, el aprendizaje y por lo tanto los resultados, pero no la visión de que los resultados se puedan obtener de cualquier forma. Buena parte de las direcciones liceales hacen persecución para que los docentes, sin importar la calidad del aprendizaje adquirido por los alumnos, modifiquen las notas al alza y con ello incidir fuertemente en los índices de deserción, repetición y promoción”, explicó a El Observador el secretario general de Fenapes, José Olivera.

“Es una forma más de maquillar los resultados, es una verdadera estafa a la sociedad y al propio estudiante. Obviamente si yo lo promuevo como si fuera un raviol y es una hamburguesa de McDonald’s, sin importar si realmente aprendió, lo estoy perjudicando y estafando hacia el futuro”, agregó Olivera.

El integrante del gremio expresó que “los resultados no cambian de hoy para mañana sino en un proceso de mediano a largo plazo” y que hay que tener “paciencia”, pero que aquí influye mucho la “incidencia de los tiempos políticos y más en campaña electoral”. “Muchas veces los resultados que hoy son malos dan cuenta de las políticas educativas que se han implementado y hoy se pretende responsabilizar a los docentes como los únicos culpables de los resultados”.

Algunas de las políticas implementadas que Olivera considera que deberían cambiar son por ejemplo los bajos niveles de exigencia que existen hoy en las pruebas de evaluación de los estudiantes, y la responsabilidad impuesta al docente del de las exigencias que impone la sociedad al sistema educativo. Este punto, según el dirigente de Fenapes, “desvirtúa la función que es la de enseñar y trabajar con el conocimiento”.

“Estas políticas han sido nefastas para la educación y la sociedad en su conjunto. Hoy los docentes hacen de todo menos enseñar. Exigen menos y todavía si no se logran los resultados son los responsables”, apuntó.

Olivera señaló que hay un discurso contradictorio porque las autoridades de la educación no ponen en práctica el conjunto de normas y derechos consolidados por la fuerza política que las seleccionó. “Hay un marco de autoritarismo bastante fuerte, estamos convencidos, y una insistente política de desconocer al sindicato. Secundaria construye s realidad en base a los informes de los inspectores y no importa lo que el gremio nacional diga”, apuntó.

“Celsa Puente dice en los medios que está dispuesta a negociar, pero en realidad en ese discurso se esconde su negativa con el sindicato. Nos dice ‘saben que tienen razón en todo lo que dicen pero nosotros políticamente no tenemos la fuerza ni las condiciones para modificarlo, es decir ‘síganse jodiendo porque yo no puedo hacer nada’”, añadió.

Fenapes considera que el Poder Ejecutivo y el Parlamento deben tomar cartas en el asunto porque fueron los que propusieron a las personas que ocupan los cargos hoy en la educación.
“Pedimos evaluación, que se investigue, que se pidan cuentas. Hay una planificación en el presupuesto quinquenal que el Parlamento votó que se iban a construir 42 liceos y no se van a hacer en el período, alguien tiene que responder por qué”, recalcó Olivera.

Olivera informó que cada filial definirá cuáles son las medidas que se tomarán y que muchas están hablando de hacer ocupaciones, y convocar a estudiantes y vecinos para explicar a la población lo que está sucediendo.

El sindicato pedirá una entrevista a la Comisión de Educación y Cultura de Diputados para denunciar la situación y se evalúa una reunión con el ministro Ricardo Ehrlich.

“Estamos dispuestos a negociar, el problema es que no ha habido negación porque no quieren. Hay una decisión política del gobierno de Mujica de no negociar colectivamente con los trabajadores públicos. Esto se recrudeció en el caos de la ANEP cuando asumieron Netto y Landoni tienen una adhesión muy fuerte con el presidente. Obviamente que si esta es la orden del presidente el CODICEN la aplica. Ahí está el problema. Se dice diálogo con todos pero no lo hace con nadie”, finalizó Olivera.

by Kalooga