Documento de balance de la Asociación de Funcionarios del Sanatorio Americano sobre la lucha dada por el reintegro del compañero Sebastián.
De lucha y otras cosas
Compañeros/as
,
El día de
hoy nos encontramos nuevamente reunidos, en esta oportunidad para hacer un
balance
de lo actuado hasta ahora, lo logrado y una evaluación del camino a seguir.
En primer
lugar, comunicamos a todos la situación actual del compañero Sebastián
Hernández,
injustamente
despedido el 1 ero de abril. Despido computado con carátula de “ despido por
motivos
disciplinarios”. Nota en la cual, se expresaba el agravante, de solicitarle
retirarse del
sanatorio
de forma pacífica, atacando directamente a su dignidad, dejándolo cómo un
trabajador
violento . Despido arbitrario, injustificado, falto de pruebas y garantías, y
sobre
todas las
cosas argumentado con MENTIRAS que fueron demostradas como tales, por los
aportes
de los representantes de AFSA y que despertaron en gran parte de los
trabajadores del
Sanatorio
Americano un gran desacuerdo y espíritu de lucha colectiva. La semana pasada,
luego de
emprendido nuestro conflicto, de varias medidas de lucha emprendidas por
nuestro
colectivo,
acompañados de la solidaridad activa de muchos sindicatos hermanos de la salud,
sindicatos
de otras ramas y del consejo central de nuestra Federación, fuimos convocados a
reunión
con gerencia de rrhh. En la misma, recibimos una propuesta concreta de la
patronal:
Para
Sebastián, cambio de carátula, despido incentivado, computándose el pago de un
doble
despido
en 4 cuotas, siendo la primera al momento de firmar el acuerdo, y una carta
certificando
el tiempo trabajado, las tareas y responsabilidades que comprendieron su
relación
laboral.
Por otro
lado, la realización de un protocolo de abuso y acoso laboral, la intervención
de un
profesional,
que trabaje con el jefe del sector y el equipo del área, con la finalidad de
mejorar
el
relacionamiento, y una reunión con dos directivos del Sanatorio que nos
recibieron el día
viernes.
Está
propuesta se transmitió al compañero, dándole la libertad de decidir sobre su
situación y
su
destino. Él, luego de haber tenido instancias con el abogado del sindicato y
haber evaluado
el
proceso legal a seguir, los tiempos, y posibilidades de resultado, nos notifico
su interés de
aceptar
lo que en la propuesta le competía, por lo que automáticamente derivamos su
caso a
nuestro
abogado, para que le dieran las garantías necesarias y un proceso limpio frente
al
acuerdo a
celebrar por su parte.
Así mismo
el día viernes, AFSA fue finalmente recibido por el directorio. En dicha
instancia,
AFSA hizo
una presentación clara de todos los pasos que se dieron en función de la
situación
del
sector, de las diferentes instancias, solicitudes y denuncias que se
presentaron, relato con
detalle
las graves acciones que tuvieron el jefe del área y el gerente administrativo
de la
institución,
ratificamos nuestra gran desconformidad con el despido arbitrario de un
compañero
y la falta hacia todos los trabajadores. Ningún argumento se presentó para
demostrar
la postura intransigente del directorio. Quedando evidenciada de esta instancia
la
clara
maniobra de un jefe mentiroso quien creyó poder ejemplificar su modus operandi
a
través de
un despido. Pero, los trabajadores supimos demostrarle que aquí no se tocan
nuestros
derechos, y no permitiremos atropellos de este tipo, sin dar la batalla.
Sobre lo
actuado,
Así como
lo definimos en la ronda de asambleas del día 4 de abril, AFSA se pronunció
desde el
principio
en repudio de esta decisión arbitraria emprendiendo el camino de la
reivindicación!
Se
mantuvieron instancias en DINATRA, intentando demostrar con las pruebas que
tenemos la
errónea
decisión de esta patronal, ningún resultado favorable surgió de dichas
instancias. En
primer
lugar porque ningún integrante del directorio se hizo presente, en segundo
porque la
instancia
con el gerente administrativo de la institución “ el contador”, No fue más que
un
atropello
al sindicato, una continuidad de mentiras e inconsistencias, que solo dejaron
ver la
cadena
jerárquica que promociona y ampara este tipo de acciones de parte de la
jefatura del
sector. Y
por último, porque las instancias no volcaron ningún resultado aceptable por lo
que
fuimos
empujados a llevar adelante la decisión votada en asamblea de entrar en conflicto,
reivindicar
el puesto del compañero y exigir ser recibidos por el directorio del Sanatorio.
Este
camino
dio sus frutos, logrando gracias al compromiso de muchos compañeros del
Sanatorio y
de otros
sindicatos, que se recibiera la propuesta mencionada anteriormente.
Lo
logrado:
Demás
está decir que jamás nos conformaremos como colectivo cuando un trabajador queda
sin su
fuente laboral, pero lo que si debe recalcarse es que aquí, el cambio de
postura del
directorio
en ofrecer una indemnización especial al compañero, que en términos reales es
el
máximo
objetivo que pudiera tenerse en el ámbito legal, es una muestra de que tanto
Sebastián
como los trabajadores del Sanatorio Americano estábamos en lo cierto afirmando
que no
existía ninguna prueba real de dichas acusaciones, que no se computo un despido
argumentado,
sino que el directorio de Sanatorio Americano respondió a las graves acciones
de un
jerarca que atropella y hostiga a los trabajadores. Sebastián se va, pero con
la dignidad
intacta,
con la frente en alto, y la paz interior de haber marcado historia en el
Sanatorio
Americano,
logro no solo irse con el cambio de causal y una compensación económica por la
situación
en que lo expuso su jefe, sino que dejó una semilla sembrada en nuestro camino,
un
protocolo
de acoso y abuso, la garantía para sus compañeros que un profesional se ocupará
de
atender
las consecuencias que genera en cada trabajador estar sometido a estás
situaciones.
Gracias a
todos los compañeros que tomamos esta situación como propia, logramos en
conjunto,
que este desenlace no fuera tan desmedido ni tan injusto.
Que
enseñanza nos dejó:
Este
camino, que la mesa representativa de AFSA viene recorriendo en los últimos
años, en el
que hemos
asumido como representantes un roll protagónico a nivel general en
participación
y en
solidaridad, visualizando la necesidad de caminar de la mano de la unidad, la
solidaridad y
la lucha
constante. Demostró, con el caso de Sebastián que es el camino que debemos
seguir
fortaleciendo.
Para que no existan más Sebastianes en ningún punto de trabajo del país, es
necesario,
lograr garantías reales para los trabajadores, leyes que nos protejan, acuerdos
colectivos
que pongan límite a la prepotencia patronal, y sobre todas las cosas que dejen
de
usarnos
como una moneda de cambio. Eso solo sucederá el día que los trabajadores,
retomemos
el camino colectivo de la participación activa, de la lucha, y que las leyes
dejen de
decir que
un patrón tiene derecho a echarnos con el simple acto de pagarnos un despido.
Más
que nunca
estamos convencidos, que seguiremos sembrando estos valores, convenciendo a
cada uno
de nuestros compañeros a participar, luchar, y avanzar hacia estás conquistas.
El camino
a seguir:
Cómo
trabajadores, debemos despertar y tomar las riendas de nuestras situaciones en
cuanto
a la
relación laboral que nos une con esta institución, denunciar los actos de abuso
y acoso de
forma
contundente y no permitir que nos atropellen o naturalizar el abuso. Trabajar
con
compromiso,
pero con respeto y exigir respeto. Los trabajadores siempre estaremos en la
fila
del fondo si nosotros mismos no nos volvemos protagonistas de nuestra
historia. Cosechemos
lo que
Sebastián sembró, cosechemos lo que los representantes de AFSA vienen sembrando
y
transmitiendo,
fortalezcámonos día a día participemos, opinemos, propongamos, y sobre
todos
construyamos juntos el camino hacia un mundo más justo.
Por más
unidad, más solidaridad, y más lucha.
AFSA sos
vos
No hay comentarios:
Publicar un comentario