Cierre de GLOVO
La empresa internacional de
Delibery decidió retirarse de Uruguay, dejando a 100 trabajadores desempleados.
En nuestro país esta empresa compite con Rappi, Pedidos Ya y Uber Eats.
La característica de este tipo de empleo es la de precariedad a lo que se suma el riesgo de accidentes al andar a contrarreloj por las
calles saturadas de vehículos. La mayoría de estos se mueven por la ciudad en
bicicletas sumándose al ejecito de deliberys particulares que trabajan para
pizzerías u oros negocios.
Montada sobre esta precarización
del trabajo, Glovo cerró el 2019 valorizada en 1000 millones de dólares.
Presente en 290 ciudades a lo largo del mundo esta empresa decidió cerrar sus
operaciones en algunas de estas en donde marchaban tras otras apps.
El año pasado la Justicia de
Buenos Aires decidió suspender las operaciones de estas empresas hasta que se
cumplieran los requisitos mínimos estipulados en el Código de
Tránsito y Transporte, esto se dio tras la sucesión de accidentes.
Los trabajadores no son empleados de las Apps, bajo la truchada del
“empredurismo” son asociados de la empresa corriendo con todos los riesgos. No
hay horario de trabajo ni protección alguna. Esclavos modernos.
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